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Como Religiosa
Si te sientes profundamente amada por Dios y agradecida humildemente por todos los dones que te ha dado.
Si deseas compartir los dones y la vida con los más necesitados.
Si te llena de alegría y paz hacer el bien a los que te rodean.
Si te duele el sufrimiento de los niños desprotegidos.
Si te inquieta la apatía de los jóvenes.
Si en tu proyecto de vida entra el proclamar la bondad de Dios y su preferencia por los desvalidos.
Si estás dispuesta a la aventura de salir de tu casa y de tu familia para compartir con otras la vida y poner todo en común.
Si estas dispuesta a perder tu tiempo, tu energía y tus fuerzas por aliviar sufrimiento y consolar.
Si Jesucristo y su mensaje te plenifica y deseas hacerlo realidad en tu vida.
Si te atreves a preguntarle al Señor: ¿Señor qué puedo hacer?
ENTONCES, DETENTE Y ESCUCHA.
EL SEÑOR TE PUEDE ESTAR INVITANDO A LA VIDA CONSAGRADA EN LA CONGREGACIÓN DE HERMANAS DE LOS ÁNGELES CUSTODIOS.